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Época de viaje: Primavera (Europea)
Tipo de viaje: Por libre
Esta vez me voy a aventurar en la Región
de Flandes (Bélgica) para conocer sus principales ciudades. Dispongo de un total de 6
días para lograrlo y me uno a dos compañeros de viaje que están igual de
entusiasmados por conocer lo que Bélgica tiene para ofrecernos, queremos ver
sus hermosos canales, sus ciudades empedradas y como no…beber toda la cerveza
que podamos, ya que la cerveza belga es muy reconocida a nivel internacional
Tip: En Bélgica se habla neerlandes, francés y alemán por lo cual,
nosotros vamos preparados con el inglés, idioma internacional con el cual
esperamos hacernos entender (y efectivamente lo hicimos), aunque en muchos
sitios nos sorprendimos con gente que nos hablaba en español (pero eso fue en
contadas ocasiones). En general todo (la carta de los restaurantes, el metro,
avisos, etc) estaba en francés/neerlandes y algunos de los sitios de interés
tenían explicaciones en inglés (de español ahí si nada). Así que vayan
preparados para ello.
Empecemos pues
Día 1: Mi vuelo llegó en la tarde-noche procedente de Madrid al Aeropuerto Charleroi (todos los vuelos de Ryanair llegan aquí), el cual se encuentra bastante alejado de la ciudad de Bruselas.
Para salir del aeropuerto (y a no ser que
alguien venga a recogerte en coche) es absolutamente necesario contar con algún
shuttle. En mi caso, contraté el shuttle de Flibco directamente en la página de
internet del aeropuerto Charleroi:
http://www.charleroi-airport.com/passagers/acces-et-stationnements/brussels-city-shuttle/index.html)
Este bus aparca en la salida nº 4 del
aeropuerto (directamente en todo el frente del aeropuerto que es pequeño, así
que no hay pérdida) y te lleva hasta la estación de trenes de “Gare du Midi/ Brussels-Midi” en
Bruselas en aproximadamente 60 minutos. Tiene una frecuencia de salida de cada
30 minutos (h:00 y h:30).
Tip: Los tiquetes de este
shuttle comprados por internet son más baratos que comprarlos en el mismo
aeropuerto. Así que es una buena opción para economizar. Hay la posibilidad de
comprar el billete solo de ida (aeropuerto-bruselas) o de ida y vuelta (aeropuerto-bruselas-aeropuerto), yo compré el de ida y vuelta,
ya que sabía las fechas exactas en las que tendría que ir y volver y el tiquete
es válido para utilizarlo durante todo el día elegido (no te da hora de viaje,
sino que permite que lo tomes a cualquier hora siempre y cuando sea del día que
elegiste)
Una vez dentro del bus, me dispongo a
esperar la hora que tarda en llegar a Bruselas. La ventaja, es que al dejarte
en una estación de metro/cercanías, puedes desde allí moverte a donde más te
convenga en la ciudad.
Ahora bien, si ese día no te quedas en
Bruselas sino que vas a otra ciudad (como es mi caso que voy a Brujas
directamente), en la “Gare du Midi”
se compran los tiquetes que salen a otras ciudades y se toman estos trenes de
media distancia. Es solo cuestión de mirar los horarios de los trenes en esta
página: http://www.belgianrail.be/en/Default.aspx
Cuando llego a la “Gare du Midi” ya están mis dos compañeros esperándome. Para
economizar, hemos comprado un tiquete de 10 viajes y es el que utilizamos para
ir a Brujas. Hay muchos tipos de tiquetes que puedes utilizar, y debes
evaluarlo con anterioridad para ver cuál es el que más te conviene. Algunos
tipos de tiquetes son:
Standard ticket: Es el billete
individual para los mayores de 26 años. El viaje puede ser de ida o de ida y
vuelta para cualquier estación belga. El precio dependerá de la distancia entre
la ciudad de salida/llegada
RAIL PASS: Para mayores de
26 años. Validez de 1 año, no es nominativo (es decir, que si viajan 3 personas
lo pueden utilizar los 3) y consiste en 10 viajes sencillos entre dos
estaciones belgas. Cuesta 73€* en 2a clase
Billete VIA: Con el billete VIA puedes bajar
hasta en dos estaciones intermedias, y es más barato que comprar dos billetes
sencillos (Este lo puedes utilizar si por ejemplo vas a Brujas, pero te quieres
bajar unas horas para ver Gante y el mismo día continuar a Brujas)
EL Ticket Weekend: Si compramos en
la web www.b-rail.be un billete de ida
y vuelta a realizar durante el fin de semana, empezando un viernes a partir de
las 19h, podremos obtener el 50% de reducción en la tarifa normal.
Go Pass 1: es válido para menores
de 26 años. Al igual que el standard, el viaje puede ser de ida o ida y vuelta
para cualquier estación belga, pero su precio es único (6€ online*). Se puede
utilizar cualquier día de la semana y no tiene restricción horaria. Sólo es
válido para segunda clase
GO PASS: para menores de 26 años. Validez de
1 año, no es nominativo —es decir, se puede compartir— y consiste en 10 viajes
sencillos entre dos estaciones belgas, cualesquiera que sean. 50€*
(*) Precios aproximados
Tomamos el tren y en aproximadamente 1
hora ya estábamos en Brujas. Nuestro hostel estaba ubicado en la parte
del casco antiguo de la ciudad (para podernos mover a pie por los lugares que
queríamos ver), así que de la estación nos vamos caminando (sin necesidad de
tomar otro medio de transporte) y en aproximadamente 15 minutos estamos en el
hostel.
Tip: Al llegar de noche nos ayudó mucho que uno de los chicos se había
bajado los mapas de las ciudades belgas a su móvil y con el GPS llegamos
rapidísimo y sin perdernos, pero si no dispones de GPS lo mejor es traerte un
mapa con la ubicación de tu hostel respecto a la estación de tren.
Como era cerca de medianoche y con el
trajín que llevábamos, no quisimos salir más y nos quedamos en el hostel. Sin embargo
vale la pena decir, que las calles que atravesamos desde la estación estaban
solas y oscuras…nada de gente por ahí, caminando o de marcha. Tampoco vimos
muchos bares o restaurantes abiertos. Esto nos asombró mucho, pues parecía que
en la ciudad la gente se recoge bastante temprano.
Lo poco que comimos, lo hicimos en la
única hamburguesería callejera que estaba abierta en una “feria de atracciones”
cerca la hostel, pero si eso no hubiese estado ahí, habría tocado irse a la
cama con el estómago vacío.
Día 2:
Hoy salimos muy temprano a hacer un tour por la ciudad. Hace un día espléndido con cielo azul y sol (bastante inusual para la época de viaje), así que dejamos las sombrillas y chubasqueros y nos disponemos a la aventura.
Primero tenemos que encontrar dónde desayunar y en medio camino hacia la plaza principal nos encontramos una pequeña cafetería. Allí podemos degustar por primera vez lo que es una “institución” en Bélgica: Los waffles/gofres
Los hay de todos los tamaños y con todos
los topings imaginables (chantilly, chocolate, frutas, azúcar, etc) obviamente
de todo lo que le pongas dependerá el precio final.
Nos llenamos de gofre y continuamos
nuestro camino hacia la plaza principal. Ahora de día se pueden ver numerosas
tiendas y comercios abiertos y mucho movimiento tanto de locales como de
turistas.
Ya en la plaza principal vemos que hay
numerosos restaurantes para comer. Los precios de comer en la plaza principal
son más caros que comer en alguna otra calle aledaña (los precios para una
comida/almuerzo no bajaba de 19 euros el plato) y las cañas en cualquiera de
las terrazas también carísimas (no menos de 4 euros y obviamente sin tapa ni
nada)
La plaza es bastante bonita con sus
restaurantes y sus coloridos diseños. Hay coches de caballos para los
que no quieran caminar y prefieran pagar por el paseo.
También pudimos admirar el Campanario de Brujas (en holandés: “Belfort van Brugge”) que con sus 83 metros de altura es una magnifica estructura medieval, patrimonio de la Humanidad de la Unesco desde 1999. Se puede subir para visitarlo por dentro y tomar fotos panorámicas por 8 euros.
Continuamos caminando y vimos también el
edificio de la bolsa y el museo de la patata, ya que como se sabe, la patata
frita es originaria de Bélgica y es también una comida muy típica que venden
incluso en la calle para que la gente las vaya comiendo en cartuchos de papel.
Luego seguimos caminando y vamos hacia los
canales los cuales cruzan una gran parte de la ciudad y son uno de sus grandes
atractivos turísticos
Gracias al mapa que nos han dado en el hotel nos damos cuenta que hacia la periferia del casco antiguo hay algunos molinos de viento que han permanecido allí aunque ya no están en uso (no se les mueven las aspas) . No son nada comparados a la cantidad que había antaño cuando eran el motor económico de la ciudad, pero son bonitos de observar y alguno se puede visitar por dentro.
Luego de ver los molinos, damos más
vueltas por la ciudad (siempre en el casco antiguo) y conocemos otros sitios de
interés y de souvenirs. Cuando el hambre apreta salimos de los dominios de la
plaza principal y nos comemos algo por las calles aledañas lo cual se ajusta un
poco más a nuestro presupuesto.
Ya entrada la tarde sucumbimos ante uno de
los paseos en barco por los canales de la ciudad. La verdad es que no
pensábamos hacerlo, pero se veía que era una buena manera de apreciar otra
panorámica de Brujas. Y no nos equivocamos!!!, ya que fue con creces el mejor
que vimos durante el viaje (ya que en Gante y Amberes también tienen de estos
viajes en barco, pero no tan romántico y ameno como el de Brujas)
Y es que Brujas es diferente.. tiene un encanto especial y escondido que las otras ciudades no tienen. Su casco antiguo es empedrado aun y se nota un cierto aire medieval en sus calles y canales.
Otra cosa importante de la ciudad es la cantidad de iglesias que tiene, son un montón y a cual más grande!! Todas son enormes y bellísimas (mas unas que otras), pero asombra el tamaño. Se nota que invirtieron mucho tiempo, esfuerzo y recursos en ellas.
Ya hacia el final de la tarde visitamos
una de las puertas que queda aún en pie de la muralla original que rodeaba la
ciudad
Y también recorremos el “Parque de los
enamorados”, que es muy bonito y muy verde, por donde fluye el canal de agua y que
está repleto de patos y cisnes de todos los tamaños…definitivamente romántico
Ya hacia la noche estamos cansados (yo más que ellos), hemos recorrido todos los recovecos del casco antiguo y caminado muchos kilómetros en el día, pero se puede decir que tenemos muy bien vista Brujas y que la hemos disfrutado al máximo.
Tip: Llevar zapatos cómodos para caminar…y si eres propenso a las
ampollas (como yo) llevar benditas y quita ampollas
Así que para terminar nada mejor que
tomarnos una cerveza local!!!
Tip: Durante el día pudimos darnos cuenta que
los horarios de comida en Bélgica son bien diferentes. El desayuno generalmente
es muy temprano (7-9 am), la comida también (12 a 2pm) y la cena (7pm a 9pm). O
sea que si vienes con otros horarios (como el español)…tendrás que cambiarlo un
poco si no quieres quedarte sin comida.
Otra cosa importante es que siempre te
cobrarán mucho más por estar en terraza. Además, el restaurante puede tener
unos precios fuera, pero si entras a comer dentro, los precios pueden subir. De
eso nos dimos cuenta en el desayuno, si hubiésemos tomado el café y el gofre en
la barra de afuera (donde tocaba estar de pie) hubiese costado menos que lo que
nos costó dentro sentados y en mesa.
Los comercios también cierran temprano,
trabajan ininterrumpidamente pero a las 6 pm ya están cerrando, incluso los supermercados
también cierran temprano (8-9 pm), así que toca estar muy atento.
Día 3: A eso de las 9:30 am ya estamos en pie y listos para ir a desayunar. Esta vez tomamos algo más sencillo cerca a la plaza principal, los desayunos aquí son más costosos que la media de Madrid, pudiendo estar fácilmente entre los 6 y 12 euros….a no ser que solo te tomes un café. El día nuevamente es azul con sol y un poco más caluroso que el anterior.
Damos algunas vueltas más mirando lo que
nos quedó por ver el día anterior y a eso de las 12 estamos de vuelta en el
hostel para recoger las maletas y dirigirnos nuevamente a la estación de trenes
para ir con destino Gante.
La estación de Gante se encuentra más
alejada de nuestros hostels previstos (porque también está alejada del centro
histórico como tal), así que nos toca tomar tranvía para llegar. Ya en la ruta me doy cuenta de que yo podía haber optado mejor
por la opción de un bus que me dejaba más cerca, así que eso lo tendré en cuenta
para la vuelta a la estación. El ticket de tranvía/bus es este y se compra en cualquier
kiosko (dentro o fuera de la estación de trenes):
El hostel que me tocó esta vez (que es
diferente al de mis dos compañeros de viaje que reservaron después de mí y ya
no encontraron cupo) es bastante bonito y confortable. Se nota que fue
reformado hace poco y las cosas están todas en perfecto estado.
Las habitaciones son monísimas y la cama y
el desayuno fueron los mejores que tuve durante todo el viaje. Justo cuando me
acabé de acomodar, llegaron mis compañeros, a quienes el tranvía había dejado
más cerca de su hostal. Y partimos juntos hacia el centro.
Allí pudimos ver “La catedral de San
Bavon” y el campanario de Gante
Su plaza central
Y su canal, que es el que aparece en todas
las fotos que ves de Gante.
Como hace tan buen clima (ni siquiera se
necesita llevar la chaqueta puesta), la gente está totalmente volcada fuera y
parece como si estuviésemos en pleno verano. Esta vez comemos en la plaza mayor
donde encontramos un menú bastante bueno. Los precios de las comidas en Gante son
más baratos que en Brujas y hay también más variedad (esta vez ya vemos hasta
un Mc Donalds!! cosa que en Brujas nadaaaa) o sea que es apto para todos los
presupuestos.
Acabada la comida cruzamos el puente del
río y nos dirigimos a ver el castillo de los Condes, que es una de las
atracciones turísticas principales de Gante
Y durante lo que queda de tarde nos dedicamos a pasear por las callejuelas y el canal, siempre dentro del casco histórico
Ya cayendo la tarde a pesar de que hace sol, empieza a hacer un viento que cala, así que nos enchaquetamos nuevamente y nos dirigimos a una de las terracitas próximas al puente principal a tomar una de las cervezas más famosas en Bélgica: la “Delirium Tremens”, en este caso la modalidad Kriek (o cerveza roja, de la cual hay en sabores de cereza o frambuesa), acompañada de patatas fritas, que siguen siendo un símbolo de cocina muy tradicional también en Gante.
Y así terminó el día que teníamos pensado
dedicar a esta hermosa ciudad. Hay gente que visita Gante de paso hacia Brujas
y también alcanzaría en ese tiempo a ver lo más emblemático de la ciudad,
nuestra ventaja al dormir allí es que pudimos disfrutar más del ambiente de la
ciudad y conocer todos sus rincones sin tantas prisas.
Día 4: Hoy dedicamos la mañana a la compra de souvenirs y a hacer algunas diligencias personales y quedamos en encontrarnos a las 11:30 am en la estación de trenes para seguir con destino a Bruselas.
Luego de más o menos media hora llegamos es la Estación Brussels-Nord que es la que más cerca nos deja al hostel que hemos elegido (aunque el tren hace paradas también en Brussels-Centraal y Brussels-Midi). De la estación no cogemos ningún transporte más sino que vamos andando hasta el hostel y demoramos cerca de 15 minutos. Estamos muy cerca a la estación de metro "Rogier" (linea 3).
Esta vez, el hostel elegido es más grande
y masivo que los demás…y por lo tanto más lleno de gente. Puesto que no se
puede entrar hasta las 3pm, dejamos las maletas en el cuarto que tienen
habilitado para ello y salimos a conocer la ciudad.
Hemos decidido hacer hoy las rutas más
lejanas ya que como vamos a hacer noche allí, no hay inconveniente si se nos
hace tarde, y más bien dejar el centro de la ciudad para el último día ya que
estamos relativamente cerca de él (a 15 minutos caminando), y con eso no estamos el día del regreso corriendo
de vuelta al aeropuerto. Aquí les dejo el mapa del metro de Bruselas para que se guíen de lo que les voy contando:
Así que en la agenda en primer lugar
aparece el Atonium. Para llegar a él solo tuvimos que comprar el tiquete de
metro (los venden individuales o de 5 y 10 viajes, los cuales permiten economizar bastante ya que uno solo cuesta 2.10 euros y el de 5 por ejemplo cuesta 8 euros) y dirigirnos hacia la estación Heizel (linea 6), una vez allí sales fuera y ya puedes divisarlo. Se
encuentra relativamente al lado del parque de “Mini Europe”, el cual ya
habíamos decidido que no visitaríamos.
El Atonium es una estructura de 102 metros de altura y emblemática de Bruselas, la cual fue construida para Expo Bruselas de 1958 y que representa un cristal de hierro ampliado 165 mil millones de veces.
A mi parecer es impresionante para verlo
por fuera, pero por dentro no me llamó mucho la atención conocerlo, además que
la fila que tocaba hacer para entrar te hace esperar demasiado y perder tiempo
valioso. Uno de los compañeros decidió sin embargo entrar a verlo y entonces
nos separamos, mientras que él hacia eso, con mi otro compañero nos devolvimos
en metro para hacer una ruta fuera del casco antiguo y conocer:
El parque del cincuentenario:
Los diferentes edificios de la comisión y El parlamento Europeo:
Hacia el final de la tarde nos reunimos los 3 nuevamente para comentar nuestras experiencias mientras degustábamos una deliciosa cerveza. Esta vez le tocó el turno a la “Morte Subite” también en modalidad krierk (roja)
Posteriormente nos dirigimos hacia el Palacio Real, del cual captamos su majestuosidad ya cayendo la noche.
Y luego nos dirigimos hacia el centro con
la intención de ver el “movimiento nocturno”, el cual era bastante aquel día,
ya que había un concierto cerca a la Plaza principal y todo estaba a reventar
de gente…y ahí nos quedamos hasta pasada la medianoche.
Día 5: Para
hoy tenemos planeado hacer el trayecto Bruselas-Malinas-Amberes-Bruselas, el
cual nos servirá para conocer estas dos ciudades emblemáticas de Bélgica
El tren que tomamos desde la
estación Brussels-Nord, demora cerca de 20 minutos y nos deja en Malinas en una estación
desde la cual es relativamente fácil alcanzar el centro caminando.
Así que mapa en mano, nos dispusimos a
caminar hacia la plaza central. Haciendo el trayecto nos desviamos para ver la iglesia de Onze-Lieve-Vrouw over de Dijle en donde según la guía había un cuadro de Rubens…y sí que
estaba, ahí a un lado del púlpito con otros cuadros “x” a su alrededor. Nos
pareció un poco raro ver una obra de una autor de este calibre ahí puesta sin
ningún tipo de protección ni atención…pero bueno, la pudimos fotografía a gusto
Luego seguimos caminando y empezaron a
aparecer ya los canales de agua y a divisarse la Catedral de San Rumoldo, que con
sus 97 mts de altura es gigantesca y domina toda la plaza principal
También en su plaza principal aparece la
estatua de Margarita de Austria, esto llama la atención ya que casi siempre en
las plazas principales hay estatuas de hombres, y en este caso Malinas ha
escogido a una mujer para su representación.
Caminamos otro poco por sus callejuelas y
entramos a la iglesia, pero la verdad es que en Malinas hay poco más que ver,
así que muy a medio día ya estamos volviendo a la estación de trenes para
seguir nuestro trayecto hacia Amberes, actualmente la segunda ciudad más
poblada de Bélgica por detrás de Bruselas.
Llegamos como en media hora
aproximadamente. La estación de tren en este caso si es gigantesca y muy
bonita. Lo mejor es que desemboca directamente en un boulevard que solo debes
seguirlo para que te lleve a la Plaza Principal y al rio Escalda, así que no
hay pérdida.
Seguimos el boulevard el cual estaba lleno
de gente ya que era otro soleado día de “casi verano” (en plena primavera). Hay
infinidad de tiendas de todas las marcas y también los típicos puestos
callejeros de venta de Gofres.
Pasamos por el que fue el edificio más
alto de Bélgica (que estaba en remodelación) y llegamos a una pequeña plaza: la
“Groenplaats” desde la que se divisaba la Catedral de Amberes, la cual
construida en un claro estilo gótico se alza a 123 metros de altura y es
el mayor templo religioso de Bélgica.
La catedral está rodeada de plazas, tiendas de souvenirs y rincones para comer todo tipo de cosas, diferentes tipos de restaurantes (muchos italianos) de infinidad de precios, así que tampoco vimos ningún inconveniente respecto a conseguir comida de acuerdo al presupuesto.
Después de comer seguimos la visita hasta
llegar al ayuntamiento de Amberes, el cual está decorado en su fachada con
numerosas banderas y se encuentra ubicado en el lado occidental de la Grote
Markt.
En el centro de la Grote Markt o plaza
principal, también se puede observar la “Fuente
de Brabo” que data desde los inicio de la ciudad
Siguiendo nuestro camino empezamos a divisar el rio Escalda y podemos
acceder a un punto panorámico tras subir un pequeño puente. Ahí también se
puede divisar el Castillo de Amberes el cual es posible visitar gratis.
Luego de visitar el castillo descansamos
un poco en frente del rio y luego volvimos hacia la Plaza principal para
recorrer todos los ramales y callecitas que nos hacían falta…así pasamos el
resto de la tarde entre camino y cervezas. Amberes es una ciudad que la verdad merece
mucho la pena visitar!!
Ya hacia final de la tarde tomamos el tren
para devolvernos a Bruselas. El trayecto dura cerca de 1 hora y nos deja esta
vez en la estación Brussels- Centraal, ya que queremos recorrer algo del centro
antes de que oscurezca
Es así como encontramos la calle del famoso “Manneken Pis” y lo retratamos (como otras cuantas personas que estaban ahí para lo mismo)…la verdad es que la escultura del niño no tiene nada del otro mundo..es decir..mejores hay muchas…pero puesto que es el sitio típico..
Cerca de la estatua hay varios sitios
de gofres…yo me antojo de uno, esta vez
con deliciosas fresas encima
Obviamente y luego de fotografiado el niño
queremos ir a por la niña…la menos famosa “Jeanneke pis”. Esa sí que nos fue más
difícil encontrarla, entre todas esas laberínticas calles llenas de bares y
restaurantes (además la gente a la que le preguntábamos nos indicaban el sitio
del Manneken). Pero al final, justo en el mismo callejón donde está el
“Delirium Tremens” encontramos a la niñita, eso sí custodiada por una fuerte
reja…casi que ni se la podía ver
Y bueno, ya que estábamos por ahí en la
zona de bares, decidimos parar en el bar de la “Morte Subite” a tomarnos la última
cañita de la noche. Eso sí, solo por estar en el renombrado bar ya te cobran el
doble por la misma cerveza que en un bar normal, pero bueno, todo sea por un
poco del baño de la popularidad!!
Ya cansados nos dirigimos al hotel caminando..y yo por lo menos caigo semi-muerta de cansancio
Día 6: El día de hoy nos dedicamos a ver lo faltante de Bruselas: la catedral, los famosos muros de comic y a comprar chocolates. Hace un calor increíble, estamos a cerca de 24 grados, algo muy raro en esta época del año..pero que a nosotros nos vino muy bien.
La catedral de Bruselas de 65 mts de
altura y claro estilo gótico fue la menos imponente de todas las que vi en el
viaje
Los murales sí que están esparcidos por
todo el centro histórico, lamentablemente no todos están en buen estado de
conservación, muchos en sus partes bajas ya han sido dañados con grafitis y
posters.
También nos encontramos con el nada famoso “Perraken Pis” jajajaj..o bueno…una estatua de perro haciendo pis también…
A las 18:00, y luego de ir al hostel a
recoger mi mochila, tomo el tren con destino a la estación Bruselss-Midi desde
donde en la calle" Rue de France" sale mi transporte en bus al aeropuerto Charleroi (lo mismo que a mi
llegada).
Mis compañeros toman la otra vía (que
también es muy válida, aunque saliendo antes que yo llegaron mucho después al
aeropuerto) que consistió en tomar el tren en Brussels-Nord hasta la estación de
Charleroi-Sud y de ahí tomar el bus hasta el aeropuerto de Charleroi.
A las 21:00 pm salió el avión de vuelta a Madrid
y finaliza nuestro viaje. Para un total de 6 días, hemos conocido las
principales ciudades de la región de Flandes, visto sus sitios emblemáticos,
tomado sus cervezas y disfrutado sus exquisitos postres y comidas. Un viaje
para recordar!!
Los hostal que utilice en este viaje fueron:
Brujas: http://hostellybeer.com/
Gante: http://www.kabahostel.be/nl
Bruselas: http://www.sleepwell.be/
Brujas: http://hostellybeer.com/
Gante: http://www.kabahostel.be/nl
Bruselas: http://www.sleepwell.be/
Tip: Debo decir que los lockers de los hostels de este viaje dejaron
mucho que desear…eran demasiado pequeños para meter toda la mochila, por lo
cual solo podías meter allí lo más importante (en algunos casos te tocaba a ti
llevar el candado para cerrar tu locker) y se quedaba lo demás por fuera..lo
cual conlleva su correspondiente riesgo de seguridad.
No sé si será en general en los hostels de
Bélgica, pero si queda un sinsabor extraño al dejar tu mochila ahí
abierta…rogando porque nadie te la esculque.
Más información:
Si te has leído este blog por favor deja tu comentario/duda/sugerencia/aporte!!! Nos ayudará a todos!! Gracias...
Hasta la próxima…
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